Cuando nuestros lectores tengan acceso a esta noticia, ya se habrán aprobado los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para el año en curso. Y, a pesar de los esfuerzos realizados por la Federación de Cines de España (FECE) en las últimas semanas mediante reuniones con todos los grupos parlamentarios, la reducción del “IVA cultural” que el Congreso ha incluido en estos PGE no afectará al cine. Solo se aplicará a espectáculos en vivo, como el teatro y… ¡las corridas de toros!
En palabras de los portavoces del Partido Popular, “El cine solo merece especial trato fiscal cuando se trata de creación; por lo tanto, la distribución y exhibición no son industrias culturales y tendrán que continuar soportando, al menos hasta 2018, el 21% de IVA sobre el precio de las entradas; además, tanto exhibición como distribución son industrias consideradas multinacionales…”
Imposible reunir más desatinos en una sola frase. El Gobierno, a estas alturas, tiene en su mano multitud de informes que demuestran la falsedad de las declaraciones antes citadas; por ello no podemos pensar ya que sus decisiones son fruto de error o mala información: son pura y llanamente consecuencia de una inquina profunda cuyas raíces se remontan a los años del “no a la guerra de Irak”.
Pretender que el cine-creación exista sin salas donde exhibirse es una digresión que no se puede mantener por mucho que los políticos de turno se esfuercen en ello: el resto de los países europeos van en sentido contrario, y ya sabemos qué pasa cuando todos los conductores de la autopista vienen en sentido contrario al tuyo…
Además, resulta una falacia absoluta la afirmación de que el Gobierno apoya al cine-creación: en el resto de los países europeos las ayudas, incentivos y desgravaciones fiscales a la producción propia superan a la que reciben nuestros productores en proporciones nunca antes vistas. Y por si fuera poco, las entidades de gestión han tenido que volver a denunciar al Reino de España por incumplimiento de las decisiones adoptadas por el Tribunal Superior de Justicia Europeo en relación con la compensación por copia privada, según publicábamos en nuestra newsletter del 28 de marzo.
Queremos complementar este comentario con la publicación -otra vez- del cuadro estadístico donde se aprecia claramente cómo el aumento del IVA desde el 8% al 21% produjo un descenso inmediato de 100 millones de euros en la recaudación anual de los cines españoles, con la consiguiente desaparición de muchas salas y la destrucción de miles de puestos de trabajo (además de la desertización cinematográfica de grandes zonas del territorio nacional).