Concluimos nuestra serie de entrevistas a los productores de las películas más relevantes en los Premios Goya 2021 con Sentimental, dando la palabra a la productora Marta Esteban de Imposible Films, que siempre produce las películas de Cesc Gay. Por Carlos Aguilar Sambricio
Sentimental es una producción de 3 millones de euros de Imposible Films y Sentimentalfilm AIE dirigida por Cesc Gay y que llega a la ceremonia con 5 nominaciones.
Cine&Tele: Tenéis 5 nominaciones a los Goya. ¿Os sorprendió obtener la nominación a Mejor Película?
Marta Esteban: Bueno, normalmente las películas que son comedias difícilmente son nominadas. A mí lo que me extraño, porque me parecía más lógico, es que hubieran nominado a Cesc (Gay) porque como director de actores es una persona muy sólida. Al no nominarle, me extrañó más, por las características de la película. De todas maneras, este año es muy extraño por todas las películas que están nominadas. Pero bueno, estamos felices. Al estar nominados, nos da visibilidad.
C&T: Técnicamente, la película es adaptación de la obra de teatro Los vecinos de arriba pero creo que Cesc, cuando escribió la historia, inspirado por una experiencia personal con una vecina, no sabía si iba a ser obra de teatro o película, ¿no?
M.E.: Él cada día está haciendo más teatro. De hecho, está haciendo ahora otra obra aquí (53 Diumenges). Él siempre ha estado muy cerca del mundo del teatro porque su mujer es Àgata Roca, una actriz de teatro de toda la vida. Pero él es un hombre de cine pero sí que quería cambiar un poco la técnica.
Alain Tanner decía que ‘El cine es un sueño pero el día que se dice ‘cámara y acción’, el sueño se ha acabado y empieza una dura realidad’. En una película intervienen muchas cosas técnicas, dependes de muchas circunstancias y hay cosas que hay que sacrificar. Es mucha técnica que manda sobre lo que tú has planificado y entran a trabajar 45 o 50 personas contigo. El teatro, aunque también hay un equipo, permite una relación del director con los actores completamente directa y cada día se pueden cambiar cosas. A él le apetecía.
La obra tuvo mucho éxito y se representó en muchos sitios y con actores muy distintos. En Buenos Aires fue un éxito increíble. Le creó mucho placer. Lo de pasarlo al cine él lo pensó enseguida. Él siempre pensaba en Un dios salvaje de Polanski. Pero dijo que no la podía hacer ningún actor que hubiera trabajado en teatro con la obra para que no tuviera la situación muy aprendida y muy difícil de modificar cosas como si fuera una persona virgen.
Tuvimos mucha suerte porque pudimos rodar en Barcelona en un plató y terminamos el 28 de febrero, es decir, que por 15 días no nos cogió la pandemia. Todo ha salido muy rodado en Sentimental.
C&T: ¿Cómo de útil fue la experiencia de la obra de teatro para testar el proyecto? Supongo que ayudó a saber qué cosas funcionaban más con el público.
M.E.: Cesc me dijo, cuando vio la película ya montada e hicimos un test para ver qué pasaba, que hizo unas pausas más largas para que el resultado en el cine fuera parecido al teatro. En el teatro el actor se puede frenar si ve que el público se ríe. El feedback lo recibe en el momento para hacer la pausa.
C&T: ¿Cambió mucho el guion para rodar la película del libreto al empezar a hacer la obra de teatro?
M.E.: Sí, el guion lo fue transformando aunque sea solamente por el movimiento de la gente dentro del espacio, que te cambia los tiempos y la actuación de los actores. Cambios no de la historia sino de la puesta en escena. A pesar de ser un sitio cerrado, tienes un movimiento.
C&T: ¿Por qué no mantuvisteis el nombre de la obra y pasó de Los vecinos de arriba a Sentimental?
M.E.: Eso fue Cesc que lo cambió al principio y lo odiamos los demás. Le decíamos ‘es muy ñoño’. Y luego, Los vecinos de arriba nos parecía que se juntaba demasiado con la obra de teatro y podía crear confusión. Todos, incluida la distribuidora, estábamos horrorizados pero después no encontramos otro título. No nos salió.
El título internacional en inglés es The People Upstairs. Ahí para las ventas sí que se ha usado ese título porque define la película más. Aunque luego cada país pone el título que quiere.
C&T: Has hablado del cambio de reparto. Destaca sobre todo el casting de la argentina Griselda Siciliani, que nunca había trabajado aquí y que tampoco a diferencia de Dolores Fonzi, por ejemplo, que estuvo en Truman, no ha hecho casi cine en su país tampoco, sobre todo ha hecho TV. ¿Cómo entró en el proyecto?
M.E.: Sí, no es una actriz de cine, por eso está en actriz revelación. Javier Braier, que es un productor que ahora lleva como agente a Griselda, es muy amigo de Cesc. En un momento en el que teníamos otras propuestas y cayeron algunos… bueno, lo típico. Él propuso a esta chica, la vimos y nos pareció que tiene mucha comedia. Me parece estupenda.
Hablamos con Cesc y le dijimos que tenía que venir para que la viera. Debemos verla al lado de Javier (Cámara), con Alberto (San Juan) y Belén (Cuesta). Porque si no hay feeling y es un mes y medio antes de rodar, tenemos tiempo de dar un golpe de timón y cambiar a la actriz. Teníamos que ver a los actores conjuntamente. Cesc es una persona de ensayar mucho, la verdad, y entonces ella vino a Madrid a hacer ensayos. Ella vivió mucho la película, se sabía los textos de todos los actores. Vino preparadísima y con Javier tuvo mucha complicidad. Ella tiene unas miradas, unos gestos y unos silencios que son completamente de comedia. Es un gran descubrimiento.
C&T: En otras películas de Cesc la parte dramática tiene más peso. ¿Era la intención aquí apostar más por la comedia? ¿Teníais ganas?
M.E.: Él quiere hacer siempre comedia. Él dice que Truman era una comedia, para que veas donde llega su utopía. Pero en sus películas siempre sale la gente un poco destrozadita. Yo creo que de sus películas, esta es la mayor comedia, a pesar de que la película es dura. Es duro lo que se habla pero la gente la ha tomado mucho como comedia. Siempre tiene esa ironía y lleva al límite las relaciones humanas de los sentimientos. Creo que los cuatro actores han logrado darle ese punto porque son gente de comedia. Esto se nota.
C&T: ¿Fue sencilla la financiación del film? Entiendo que no porque el presupuesto no es alto…
M.E.: No, pero actualmente las financiaciones de las películas son un absurdo dificilísimo. Tenemos TVE, Movistar y TVC, y también la subvención de la Generalitat y del ICAA. El problema que tenemos para financiar una película actualmente es que el 50% o 55% hemos de cubrirlo con lo que son las ventas: las televisiones, las ventas internacionales y la explotación en cine.
Claro, aquí tú corres un riesgo muy fuerte de que, con las televisiones, a ti te falta un 20%, que en una película puede ser 500.000-700.000 euros, para cubrir la película que cuentas que, en lo que tengas en cine y ventas internacionales, lo cubrirás. Esto se ha acabado y hace tiempo que no es así. Y ahora con el COVID ya se ha acabado del todo.
La única solución que yo veo es poder aumentar la intensidad fiscal que tenemos para producir una película. Nosotros tenemos el derecho al 50% de intensidad fiscal, que esto se junta con las subvenciones. En películas de nuestro presupuesto, entre 2,8 y 3,4 millones de euros, ya no te vale la pena que entren inversores fiscales para 50.000 u 80.000 euros. Entre el intermediario y tal, te queda nada y es un engorro. Por eso todos hacemos una AIE, por si tenemos la posibilidad de esto. Yo creo que en vez de pedir que aumenten las subvenciones, debemos pedir es que aumente la intensidad fiscal, es la única manera para financiar las películas.
Sentimental no tenía inversión fiscal pero debido a que tenía la subvención del 2019 y en 2020 se estrenó, nos aumentaron la intensidad fiscal como si Cesc fuera mujer. Porque yo quiero que se cambie el sexo Cesc. ¿Sabes que las mujeres tienen intensidad fiscal del 75%? Las mujeres productoras no tenemos derecho a nada porque somos las tontas del grupo. Los directores se han de cambiar de sexo y se lo he propuesto a Cesc varias veces. Aún no lo he conseguido pero lo conseguiré.
La suerte que tuvimos con Sentimental es que estrenamos en cines. Con esta situación, no podía llegar a una cifra como Truman o Una pistola en cada mano pero nos permitieron la intensidad fiscal del 75%. Esta película quizás no gana dinero pero no perderemos.
Yo estoy muy contenta de haber estrenado Sentimental en octubre porque ha tenido visibilidad. Puede estar nominada, que esto es muy importante, y luego que me da terror qué pasará después. Cuando haya normalidad, que no sabremos cuándo será, los americanos nos meterán todas sus películas. Tener una película guardada, no nos creaba un beneficio.
C&T: La película está grabada en decorado. ¿Estaba claro hacerlo así y no en una localización real?
M.E.: Sí, sí, se buscó así porque piensa que son muchos días y hay mucha noche. Filmar en noche es terrible. Ahora hay estos forillos maravillosos que te dan realismo, te dan profundidad… Teníamos que encontrar un piso que lo hiciéramos casi plató y era mejor hacerlo en decorado. Encontramos el plató en Barcelona y nos salvó la vida. Cada día se entraba a una hora, se salía, se comía allí… Se centraba todo en la actuación. Hubiera sido una película que se podía haber rodado con COVID. De hecho, la hemos vendido mucho internacionalmente y se están vendiendo remakes porque es una película que en pandemia se puede rodar muy fácilmente
C&T: El decorado tendría unas necesidades de producción muy específicas, por eso encontrar un sitio así tenía que ser algo complicado.
M.E.: Nos costó mucho porque todo está alquilado para las series. Si quieres 6 u 8 semanas, todo el mundo te dice ‘lo tengo ocupado’. Al final, en Mediapro encontramos el plató pequeño, que era suficiente para nosotros y nos fue estupendo. Nos facilitó la vida enormemente.
Aquí había unos platós muy importantes que están ya bloqueados por las plataformas aunque no rueden en un momento. Les sale más a cuenta tenerlos bloqueados.
C&T: La película se grabó de manera cronológica, que es algo poco habitual en el cine pero que los actores agradecen mucho y que al ser un único espacio, es viable. ¿Siempre fue la idea hacerlo así?
M.E.: El ideal de cualquier director es rodar cronológico. Quizás para alguno no pero es perfecto porque los actores tienen más fácil la memoria del dónde vienen. Lo que pasa es que no nos lo podemos permitir casi nunca. En este caso sí y para los actores es lo ideal y para el director también. Muy pocos directores se pueden permitir esto, se lo puede permitir Ken Loach pero pocos más.
C&T: La postproducción tanto de imagen como de sonido se hizo en Deluxe, ¿por qué elegisteis este estudio?
M.E.: Trabajamos con ellos desde hace muchos años. Nos conocemos mucho y tenemos la confianza de saber dónde estamos todos. Creo que trabajamos con ellos desde Krámpack así que hemos trabajado siempre. Conocemos los técnicos, conocemos nuestros respectivos defectos y ya no lo planteamos. Hay también una parte de comodidad. Hay otros laboratorios muy buenos pero nos conocemos bien y esto da unas ventajas por encima de otra situación.
C&T: Me llamó la atención que el film fue a San Sebastián pero una sesión especial no competitiva. ¿Por qué decidisteis eso en vez de llevarla a algún festival a competir?
M.E.: Porque cada película tiene su sitio. Yo creo que Cesc no podía llevar esta película a competición. Era una comedia y los festivales son buenos pero son peligrosos. Estuvimos hablando con Rebordinos, que es una persona muy consciente y que apoya mucho a nuestro cine. Y no es una película para competición de San Sebastián. Los periodistas te la machacan al día siguiente. La prensa canaliza la opinión de una manera distinta a si vas a competición.
Yo estoy muy contenta de haber ido a la Gala de RTVE por un acuerdo entre el festival y TVE. La televisión público creo que ha apoyado mucho el cine y también es una responsabilidad ir a esta gala. Fue lo mejor que nos podía pasar porque nos da presencia y evitas el riesgo. Ojo, quizás hubiese tenido algún premio a competición pero tienes que saber qué producto tienes.
C&T: Además de ser habitual que trabajéis con Deluxe, también soléis hacerlo con Filmax en la distribución. ¿Os entendéis muy bien?
M.E.: Cuando tú conoces a la gente, es importante la confianza que tienes. Ellos conocen las manías que tenemos cuando estrenamos, qué día estrenar, cómo me enfado si la ponen en cines cercanos… En un principio, pensamos que quizás no era un perfil tan cercano al nuestro pero en un momento dado nos fue muy fácil distribuir con ellos.
Además, antes nosotros trabajábamos las ventas internacionales con The Match Factory y Sogepaq antes pero a partir de distribuir en cines con Filmax, ellos nos propusieron llevarlas también. Aquí tuvimos más duda porque creemos que llevan un grueso de películas que no es tan cercano pero lo hicimos y nos ha ido muy bien a las dos partes. Creo que los dos estamos contentos del noviazgo. Nos informan continuamente, a qué cines van, sabemos qué pasa… En esta última la situación es muy distinta porque con la pandemia, ha sido muy complejo. Pero internacionalmente se está moviendo mucho y esto nos equilibra con la distribución nacional, que es imposible que pueda hacer ahora lo que se hacía antes de la pandemia.
C&T: Creo que Sentimental tuvo unos 100.000 espectadores. ¿Cómo valoras su rendimiento en taquilla, dadas las circunstancias?
M.E.: Está muy bien. Yo creo que si se hubiese mostrado un poco antes, hubiese podido aumentar más pero está muy bien. Creo que no podemos pedir más de lo que tenemos. Si no hubiese estrenado entonces, ¿qué hubiésemos hecho? Estrenar ahora yo no me hubiese atrevido.
Entonces, tuvimos un inicio que al menos se pudo ver en Madrid y Barcelona, aunque es verdad que duró nada, pero pudo tener visibilidad. Ahora se estrenará en Movistar y esto servirá para que se vea más allí. Queremos una película que tenga vida, que se vea.
C&T: Has dicho que con Filmax os estaban yendo bien las ventas internacionales, sobre todo con remakes. ¿Quizás ventas para estrenar la película sí que está más complicado con la pandemia?
M.E.: Nos la están comprando en algunos sitios tanto en versión original como el remake. Por ejemplo, en Italia. Esto me ha extrañado mucho. Yo creo que se necesita mucho material y se está buscando porque se está consumiendo mucho contenido. Para remake lo entiendo porque es una película facilísima de rodar en pandemia pero la versión original a mí me extrañó. No me lo esperaba y estoy gratamente contenta.
Según me dijo Filmax, en Cannes, al ser online el visionado, la vio mucha gente. Si vas a Cannes, debes ver a gente, tienes reuniones, corres de un cine a otro, no llegas a tiempos, tienes que hacer cola…
C&T: Sí, online te puedes organizar mejor…
M.E.: Exacto, si una película no te interesa, la paras y no tienes ningún problema y ves otra cosa. La gente no está tan agobiada. Algo ha debido de influir esto. Se tendrá que estudiar esto. Estamos gratamente satisfechos.
C&T: ¿En qué estáis trabajando ahora?
M.E.: Estamos rodando ya Historias para no contar, que es un guion de Cesc Gay y Tomàs Aragay. Terminaremos el rodaje a finales de abril, cruzando los dedos. De momento, no podemos decir los actores que intervienen por estas cosas de que primero se ha de notificar para el EFM de Berlín. Como ahora es una época tan difícil, las distribuidoras mandan mucho a nivel de comunicación. Es un momento en el que todos los productores estamos muy preocupados y toda la gente del cine.
C&T: ¿Para cuándo tenéis pensado estrenarla?
M.E.: Hacia abril del año que viene. Cesc querrá hacer otra obra de teatro porque ahora le gusta mucho. Además, este año, si la cosa se normaliza, hay tantas películas esperando que nosotros no creo que nos metamos de momento.
Consulta el resto de entrevistas a productores de los Goya 2021: Lina Badenes (Turanga Films) por La boda de Rosa, Elena Maeso (Amania Films) por Ane, Koldo Zuazua (Kowalski Films) por Akelarre, Valérie Delpierre (Inicia Films) por Las niñas y Ghislain Barrois y Álvaro Augustín (Telecinco Cinema) por Adú.
A continuación, puedes leer la versión online de la nueva edición de Cineinforme dedicada a la Berlinale /EFM y a los Premios Goya:
