Representantes de la Sociedad Proyectos Temáticos de la Comunidad Valenciana, SPTCV, de la que depende Ciudad de la Luz, participaron en una jornada de trabajo en Madrid presidida por la reina Letizia con motivo de la visita de una delegación de productores estadounidenses a España, organizada por la Secretaría de Estado de Telecomunicaciones e Infraestructuras Digitales, ICEX-Invest in Spain junto a Spain Film Commission.
En Cine&Tele hemos seguido muy de cerca la visita a España de una delegación de productores norteamericanos para conocer la fortaleza de nuestro audiovisual. Esta iniciativa, que tuvo lugar hace unos días, estuvo organizada por la Secretaría de Estado de Telecomunicaciones e Infraestructuras Digitales, ICEX-Invest in Spain y la Spain Film Commission; y tuvo un programa de lo más completo, tal y como detallamos en este artículo.
En la jornada informativa sobre las oportunidades que ofrece el ecosistema audiovisual español presidida por la reina Letizia, se presentó, entre otros, una delegación de la Sociedad Proyectos Temáticos de la Comunidad Valenciana, SPTCV, comandada por su director general, Antonio Rodes, que anunció la vuelta a la actividad de rodajes en la Ciudad de la Luz tras levantarse las sanciones que en su día impuso la Unión Europea.
Mayte Vañó, directora de Marketing y Comunicación de SPTCV, hizo una presentación a miembros de la Motion Picture Association (MPA), y otras plataformas y empresas audiovisuales estadounidenses de máximo nivel, sobre la vuelta a la actividad de Ciudad de la Luz, acompañada por un vídeo promocional que detallaba las espectaculares cualidades del complejo que tiene previsto volver abrir sus puertas a los rodajes el próximo mes de septiembre
La historia de Ciudad de la Luz
La Ciudad de la Luz, situada en el paraje alicantino de Aguamarga, se inauguró formalmente en 2005 de la mano del cineasta Luis García Berlanga. El complejo es un gran centro de producción audiovisual de 320.000 metros cuadrados, con los mayores platós de Europa y un tanque de agua inmenso.
Se trata del mayor complejo cinematográfico de Europa y acogió rodajes de títulos como Lo Imposible, Astérix en los Juegos Olímplicos, No habrá paz para los malvados, El camino de los ingleses o Manolete. Pero fue precisamente la Unión Europea la que “castigó” a Ciudad de la Luz. ¿El motivo? Una denuncia de los estudios británicos Pinewood por competencia desleal, al haber usado dinero público para construir unos estudios que competían con los privados y por los patrocinios y subvenciones concedidas a los rodajes.
En 2008 la Comisión Europea abrió una investigación en profundidad a instancias de esta denuncia. Y a partir de ese momento, comenzó la cruz. En julio de 2014, el Tribunal General de la Unión Europea desestimó los recursos presentados respectivamente por España, la Ciudad de la Luz y la empresa pública Sociedad Proyectos Temáticos de la Comunidad Valenciana (SPTCV), y dio la razón a la Comisión Europea. Sentenció que, además de cesar su actividad para no lesionar los intereses de otro socio de la UE, los estudios debían ser vendidos en subasta pública, y que las ayudas de 265 millones de euros concedidas por el Gobierno valenciano eran ilegales y por tanto debían ser devueltas a las arcas públicas.
En mayo de 2015, el Consejo de Europa aprobó el pliego de condiciones de la subasta de los estudios, que podía comprarse en su totalidad o en lotes. Sin embargo, tanto la subasta de 2015 como la de 2016 fueron declaradas desiertas al no alcanzar el importe mínimo exigido por la Administración autonómica.
La salida de Inglaterra de la Unión Europea (Brexit) planteó en 2016 una reflexión sobre si debía considerarse válida una sentencia emitida por un tribunal europeo a instancias de un país que ya no va a formar parte de la Unión Europea.
El presidente de la Generalidad Valenciana, Ximo Puig, tanteó la posibilidad de utilizar el complejo de Ciudad de la Luz como sede de la nueva radiotelevisión pública valenciana e incluso Netflix se interesó por comprar activos e instalarse en los estudios ( finalmente lo hizo en la Ciudad de la Tele de Tres Cantos en Madrid).
En junio de 2017 la Dirección General de la Competencia de la Comisión Europea aceptó la cesión global de todos los activos y pasivos de Ciudad de la Luz al Gobierno valenciano. La UE fijó como requisitos que en el complejo sólo se puedan desarrollar actividades no económicas durante un periodo de 15 años. Después sí podrá haber actividades económicas, para ello, la Generalitat deberá vender las instalaciones o alquilarlas.
El Gobierno valenciano consideró salvado el complejo ya que se le permitía poner en marcha el nuevo Distrito Digital de Alicante, un proyecto de atracción empresarial para el desarrollo de la economía digital en el ámbito de la Comunidad Valenciana. Además, Bruselas redujo el plazo efectivo de penalización sobre las actividades al acortar las restricciones a 2027 (se consideró como fecha de inicio el 2012). La única restricción que se mantuvo fue prohibir destinar el complejo a actividades cinematográficas, salvo las educativas.
Y la buena noticia llegó el pasado mes de marzo, cuando Bruselas levantó “el castigo” y pasó de 15 a 10 años el periodo de inactividad de estos monumentales estudios, tras un largo proceso del Consell Valenciano, con su presidente Ximo Puig a la cabeza. Así, a partir del próximo 1 de julio SPTCV recuperará el control total de los activos del complejo, lo que significa que ya no hay limitaciones ni restricciones en las actividades económicas que tiene previstas en el plan de el la Ciudad de la Luz y podrá a recomenzar a recibir rodajes. Pero, según fuentes de Cine&Tele, no será hasta el próximo septiembre, debido a las complejas actuaciones que han de llevarse a cabo.
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