El nuevo formato es un concurso que se sale de lo habitual, cuya protagonista es una niña de cinco años animada mediante tecnología CGI.
TVE ha dado nuevas pistas para su nuevo programa de entretenimiento para La 1, Mapi, que estrenará a primeros de agosto. En Cine&Tele ya hablamos de este espacio que RTVE produce en colaboración con Mediacrest y es la adaptación española del japonés Chiko’s Challenge, que tiene a Jandro como conductor.
“En RTVE seguimos apostando por nuevas narrativas, seguimos reinventándonos para llegar a más gente”, ha destacado María Eizaguirre, directora de Comunicación y Participación de RTVE, en la presentación de Mapi, “un concurso que se sale de lo habitual, y que aúna muy bien nuestra vocación de servicio público”, ha añadido Ana María Bordas, directora de Originales. Según la responsable de RTVE, el espacio reúne “novedad tecnológica, humor y puro entretenimiento para toda la familia”.
Por su parte, Daniel Domenjó, director ejecutivo de Mediacrest, ha resaltado que “estamos rompiendo la Historia de la televisión porque por primera vez en España se asumen una serie de características que no se habían dado hasta la fecha y se usa un sistema tecnológico pionero a tiempo real”.
Con respecto a la experiencia de la grabación del programa, Jandro ha comentado que “ha sido maravillosa, es el primer concurso en el que no aciertas ninguna pregunta, pero aún así quieres volver”. También ha subrayado que lo que más le ha fascinado ha sido Mapi: “Me lo paso pipa con ella, su personalidad es el gran hallazgo para mí”. Y Mapi (Carla Pulpón) le ha devuelto el halago y ha añadido que para ella es un reto porque “es meterte literalmente dentro de un personaje, de su cuerpo y su cabeza”.
El formato
‘Mapi‘ tiene una protagonista muy especial: una niña animada mediante tecnología CGI (Imagen Generada por Computación). En cada emisión se pone a prueba la lógica y la imaginación de un grupo de famosos que acuden al programa para responder a las sorprendentes preguntas planteadas por Mapi. Cuestiones muy divertidas que cualquier niño se haría y que son difíciles de responder. El objetivo de los invitados es doble: salir airosos de los peculiares interrogantes de la niña y acertar el máximo número de respuestas para sumar mapis (puntos) en sus marcadores.
