Telefónica ha señalado a la Unión Europea la necesidad de «negociar un precio justo» por permitir que grandes empresas americanas como Google, Netflix, Meta y Apple utilicen sus redes. Una reclamación que consideran totalmente motivada, ya que el 45% del tráfico mundial de internet corresponde a estas empresas.
La reciente reivindicación de José María Álvarez-Pallete, presidente de Telefónica, es el último capítulo de una guerra que lleva abierta desde el pasado año y a la que todavía parece que le restan varias batallas para llegar a su conclusión.
Por poner en contexto, las grandes operadoras de telecomunicaciones llevan tiempo exponiendo que si las gigantes tecnológicas estadounidenses resultan las principales beneficiarias de la explotación de sus negocios a través las redes, deben contribuir a los costes del mantenimiento y desarrollo de las mismas de manera proporcional. Lo cual afecta directamente a transatlánticos como Meta, Netflix, Google o Apple y también a las principales operadoras de audiovisual en streaming como Netflix, HBO MAX o Amazon Prime.
Por tanto, el objetivo de estos prestadores es conseguir que las altas instancias establezcan por ley la imposición de un canon monetario a estas empresas, que precisan de un impecable funcionamiento de las redes para su negocio pero que hasta ahora no han contribuido económicamente al buen funcionamiento de las mismas.
De hecho, en un comunicado que firmaron a finales del pasado año empresas como la propia Telefónica, Orange, Vivacom o Deutsche Telekom, se señalaba que «el modelo que pretende que todos los ciudadanos de la Unión Europea formen parte de una transformación digital global, solo será posible si las grandes tecnológicas que explotan las redes contribuyen de forma proporcional a paliar los costes de su mantenimiento.
El Gobierno se posiciona del lado de las telecos
Hasta hace bien poco, el Gobierno había permanecido mudo ante esta problemática. Sin embargo el pasado mes de septiembre, la vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, mostró su apoyo durante el foro Tech&Politics al bando de las telecos, solicitando comenzar los preparativos para alcanzar en los próximos años “la igualdad de condiciones» en este ámbito.
Previamente, el Comisario de Mercado Interior a nivel europeo Thierry Breton se pronunció sobre este asunto indicando que se llevará a cabo una consulta pública para recabar diferentes perspectivas y posteriormente legislar sobre el tema. Sin embargo, Calviño quiso ir más allá explicando que -según su criterio- «las grandes Big Tech del mercado deben contribuir en su justa medida al despliegue de las redes«.
La vicepresidenta del gobierno español añadió que esta modificación que, según la patronal europea de operadores de telecomunicaciones ETNO podría aportar a la economía de la Unión 72.000 millones de euros, será apoyada de forma decidida por parte de el Gobierno, ya que cuenta con un enfoque más realista y acorde a las nuevas características del mercado internacional que el actual sistema».