Deluxe es un referente de la postproducción española e internacional. Aprovechando que la división española acaba de recibir un premio a Mejor Etalonaje, entrevistamos al colorista que hizo el trabajo galardonado, Jorge Ortiz Yus, para que nos cuente detalles sobre cómo trabaja el equipo de Deluxe de Color, que entre Barcelona y Madrid incluye a 10 personas. Por Carlos Aguilar Sambricio
Cine&Tele: Cuéntanos cuál ha sido tu trayectoria y cómo llegaste a Deluxe.
Jorge Ortiz Yus: Estudié Imagen y Sonido y un posgrado de VFX. Mientras estudiaba trabajé en un laboratorio de fotografía. Cuando acabé los estudios empecé a buscar trabajo de lo que realmente me gustaba, en productoras, pero sobre todo en empresas de postproducción en Barcelona.
En aquella época estaban montando un laboratorio cinematográfico, Image Film y buscaban un colorista junior. Yo en ese momento no sabía en qué consistía el trabajo de un colorista. Mi idea era hacer VFX pero supongo que, al haber estudiado Imagen y Sonido, y tocado fotografía, encajaba en el perfil que necesitaban y me preguntaron si me interesaba empezar como ayudante de telecine. Esto fue en el 97 y desde entonces no me he movido. Ha cambiado el nombre de la empresa y hasta la forma de hacer el color pero llevo ya 25 años y sigo encantado con mi puesto de colorista.
C&T: Te han dado recientemente un premio en los War of Films por el corto Familiar, ¿cómo ha sido?
J.O.Y.: El reconocimiento ha sido a ‘Mejor Color Grading’ en una de las categorías de War of Films, celebrados en noviembre. Hicimos un corto en 2020 con el director de fotografía Mike Staniforth, con quien suelo colaborar. Habíamos trabajado antes en la serie All or Nothing de Amazon, que seguía a Guardiola en el Manchester City, y desde entonces, cuando ha podido, ha contactado con Deluxe para hacer el color.
Familiar es un corto de terror rodado en Inglaterra durante la pandemia, lo que complicó el grading ya que tuvimos que hacerlo confinados desde Barcelona y Manchester. Ahora el director David Ellison lo ha presentado a muchos festivales y ha ganado unos 60 premios, entre ellos al mejor corto, fotografía, guion… En este festival, War of Films, se premian todas las categorías y la categoría de mejor color también estaba y resultó ser la ganadora. Fue una magnífica sorpresa recibir el Laurel.
C&T: Es poco habitual, ¿no? Hay pocos eventos que premien al colorista…
J.O.Y.: Sí. El año pasado FilmLight convocó unos premios exclusivos al color. De hecho, presentamos este corto como opción al premio, pero visto luego el nivel de los premios, como Dune o Euphoria, apuestan a lo grande. A ver si el próximo año lo intentamos con una serie que estamos haciendo y tenemos más suerte. El corto Familiar que se presentó en el festival ganó el premio a Mejor Dirección, Mejor Fotografía y Mejor Color. Es el primer premio a color que se recibe aquí en Deluxe Spain.
C&T: El estilo de una corrección de color depende mucho de cada cliente y de cada producción, pero, ¿qué cualidades artísticas o de tu forma de trabajar te gusta imprimir en cada obra en la que te involucras?
J.O.Y.: Sobre todo que nadie pueda llegar a decir que sigo siempre la misma línea/estética o es muy evidente que el trabajo es mío. La fotografía de Roger Deakins es siempre reconocible. O por ejemplo el sonido de John Williams. Yo intento no encasillarme en un mood o siempre trabajar con la misma LUT. Procuro en cada producción, con todo el briefing que me dan los directores, crear una corrección de color como si fuera mi primera vez. Es más divertido hacer algo diferente para cada proyecto.
C&T: ¿Suelen trabajar contigo o estar muy pendientes los directores de fotografía o trabajas de una manera más autónoma? ¿Cómo trabajas con ellos?
J.O.Y.: No hay un patrón, depende de cada director de foto. Normalmente suelen darse dos situaciones. Los hay que su workflow es vernos el capítulo, marcar un poco la línea, luego yo hago la estructura, lo presento y acabamos de afinarlo.
A otros les gusta estar en todo el proceso de corrección, sentados al lado y comentando cada secuencia en el momento del visionado.
Al final, tratamos de conseguir que ellos estén contentos con el proceso sea cual sea la dinámica.
C&T: ¿Tú te planteas los proyectos de manera diferente si es para publicidad o si es para ficción? ¿O el look que propones depende de cada proyecto en sí?
J.O.Y.: Siempre intento que todo sea diferente. Sí es cierto que en el cine se puede ser más creativo, te dejan más manga ancha y el director de foto confía mucho en nuestro criterio artístico y técnico. Luego una vez hecho el look, tienes que igualar, mantener todo estable y que no haya diferencias en una secuencia cuando empieza y cuando acaba. Este proceso es más mecánico. Esto sucede tanto en cine como en series.
En publicidad estás más atado de manos a nivel creativo porque muchas veces ya vienen con una idea muy clara de lo que quieren, su look book, ya han visto un offline que los creativos o los clientes han aprobado, etc. Intentamos aportar algo de creatividad pero es más complicada la publicidad, sí.
C&T: ¿Cuál sería el porcentaje de trabajo entre publicidad y ficción?
J.O.Y.: En mi caso, yo hago un 60-70 % de ficción y un 40-30 % de publicidad.
C&T: Pero en Deluxe se hace mucha publicidad en general, ¿no?
J.O.Y.: Sí, tanto en Barcelona como en Madrid tenemos varias salas para hacer publicidad. De hecho, este mediodía nos estaban llamando para una, pero no sé cómo vamos a poder encajarlo porque estoy a tope con la serie. Las salas preparadas para publicidad son diferentes a las de ficción sobre todo por los requisitos en las especificaciones de los monitores.
Trabajamos bastante en publicidad, sí, pero también le dedicamos mucho a la ficción, sobre todo desde la llegada de las plataformas, lo que está haciendo aumentar el volumen al mundo de la postproducción audiovisual en su mayoría son las series.
C&T: Deluxe es una casa de postproducción muy puntera. ¿Con qué equipamiento cuentas tanto lo que es específico de color como a nivel de hardware de la infraestructura?
J.O.Y.: Hacemos corrección con DaVinci Resolve de Blackmagic. Ahora estamos con la 18.1.2 que es la última versión de Resolve. Y los paneles repartidos en nuestras ocho salas: DaVinci Resolve Advanced Panel 2 y DaVinci Resolve Mini Panel.
C&T: ¿Por qué crees que Deluxe ha sido durante tantos años un sinónimo de calidad? ¿Qué elementos de su filosofía hacen que los clientes confíen en la empresa?
J.O.Y.: Yo creo que tener el equipamiento más avanzado. Los paneles, las salas, los monitores… Ahora trabajamos con los Sony BVM-HX310, que es lo más nuevo en monitores y lo que Netflix certifica para etalonar sus shows.
Tenemos todo el equipo necesario para el cliente, que sabe que está trabajando en la mejor empresa de postproducción. Siempre tenemos todas las pantallas y monitores calibrados por nuestro ingeniero de color, según los estándares de calidad adecuados. Aparte de nosotros, los que estamos sentados con el cliente, nuestra filosofía es que el equipo sea el mejor preparado y que el cliente pueda estar tranquilo porque va a verlo en la mayor calidad posible.
C&T: ¿Cómo os organizáis a nivel colaborativo? Porque Deluxe puede ofrecer un servicio muy integral, es decir, corregís el color pero en muchos casos ofrecéis todo el pack, con VFX, sonido y todos los apartados de postproducción. ¿Cómo os organizáis a ese nivel?
J.O.Y.: Podemos trabajar indistintamente en Madrid o en Barcelona. Ahora estamos haciendo una película en remoto y el cliente no podía ir a Madrid, pero está físicamente en nuestra sala de Barcelona, recibiendo la señal en streaming, en tiempo real, y en UHD HDR.
Nuestros producers se dedican a organizarlo porque luego está el factor cliente, que lo va modificando sobre la marcha. Nuestros compañeros llevan una agenda para el día que entramos a hacer el grading. Si vienen planos nuevos, los editores online los preparan y conforman para poder hacer la corrección de color.
Con la sede de Madrid siempre estamos compartiendo material, a través de nuestra conexión punto a punto. Es bastante fluido. Por otro lado, hay veces que los coloristas de BCN vamos a Madrid y viceversa, según lo pidan los clientes. Hay movilidad absoluta para que estén lo más cómodos posible trabajando con Deluxe.
C&T: Deluxe tiene algunos de los coloristas más reputados del sector. ¿Qué destacarías de tus compañeros?
J.O.Y.: Tenemos un background de muchos años y casi todos empezamos cuando aún se trabajaba en fotoquímico. Eso nos ha dado mucha experiencia y bagaje. Aunque el lenguaje ha ido cambiando del analógico al digital, a las nuevas generaciones también les interesa el look que ofrecía el fotoquímico.
Para mí es una suerte haber podido vivir esa época, cómo se rodaba en 35/16mm, cómo se trabajaba el material tanto para revelar y positivar o en mi caso en telecine. Todos nosotros hemos sabido adaptarnos a las posibilidades que nos ofrece el digital y los nuevos espacios de color y sistemas de corrección.
Pero sobre todo diría que lo más destacado es la experiencia y talento que aportamos.
C&T: ¿Cuántos sois en total entre el equipo de Barcelona y Madrid en color?
J.O.Y.: Somos diez en total: seis en Madrid y cuatro en Barcelona. Cada vez hacen falta más porque se ha disparado el número de producciones.
C&T: Supongo que uno de vuestros retos es que hay mucho trabajo y sobre todo las series que tienen un nivel de exigencia de tiempos muy cortos.
J.O.Y.: Es un reto mantener el mismo nivel de calidad y de finishing que nos gusta como si fuera una película que tardamos en etalonar 3 meses. Intentamos que en una serie de una semana, que es lo que nos suele llevar el color, parezca que hemos estado esos 3 meses. Pero sí, cada vez aprieta más esa presión de entregar y dejarlo lo mejor posible.
C&T: ¿Cuáles han sido tus últimos trabajos y qué destacarías de lo que es el etalonaje en sí de ellos?
J.O.Y.: Ahora estoy trabajando en la segunda temporada de Bienvenidos a Edén. Se trata de una serie en la que buscaban un estilo blockbuster, algo muy potente de color, saturado, mucho brillo, atractiva visualmente. Ha sido un reto porque la mayoría de veces, los clientes quieren ser comedidos y esta vez ha sido ‘vamos a tope con el look y que la gente se enganche’. La segunda temporada es otro reto más porque vamos a darle una vuelta de tuerca a la primera.
En otra producción, Todos Mienten de Pau Freixas encajamos dentro del HDR un look muy SDR. Fue una propuesta bastante motivadora y el resultado muy efectista.
En febrero se estrena La niña de la comunión, estuvo muy bien porque es una película de terror ambientada en los años 80. Queríamos buscar un look ochentero pero que no pareciera Poltergeist, sino algo más actual.
El corto premiado fue también muy interesante de colorear porque querían un look como en los videojuegos de Resident Evil y que a la vez pareciera pintado e iluminado al estilo de Rembrandt y no pareciera rodaje, que fuera una especie de cómic. Fue un desafío y más trabajar en remoto porque el DoP no podía venir. Conforme íbamos entregando versiones, las íbamos corrigiendo trabajando por Zoom. Fue muy gratificante, estuvo genial.
C&T: Es conocido que algunos directores tienen cierta reticencia con el HDR a pesar de ser una tecnología que te da muchas posibilidades. ¿Cómo es ese dialogo con ellos para hacerles entender lo que te puede dar el HDR?
J.O.Y.: Con el HDR tenemos una gama de luz increíble con la que podemos jugar y luego, si queremos, la podemos mantener como si fuera un SDR. Pero el color y la gama de grises son prácticamente infinitos. Tienes una textura espectacular y una gran definición en todas las latitudes.
Tenemos muchísimo más rango en las gamas medias, para poner y quitar sombras… Creo que poco a poco los clientes van entrando. Al final, es como el paso del fotoquímico a las primeras cámaras digitales, que a nadie le gustaba. Como si ahora trabajas color con un negativo después de lo que puedes ver con un ARRIRAW…
C&T: Claro, al final es a lo que está acostumbrado el ojo, ¿no?
J.O.Y.: Correcto, como coloristas estamos capacitados para trabajar en cualquier espacio de color y formato de captura. Todos nos ofrecen posibilidades artísticas diferentes. Las nuevas herramientas de color nos permiten infinitas opciones para conseguir el resultado óptimo. El HDR es una considerable mejora que enriquece la experiencia audiovisual.