La cinta, que se presentó al gran público en el pasado Festival de Cannes, cuenta con la española Esther Expósito como protagonista.
Amat Escalante es, desde el inicio de su carrera, uno de los directores más estimulantes que ha producido en este siglo la cinematografía mexicana. Su visión, que navega entre lo real y lo fantástico, lo crudo y lo onírico, el deseo y la muerte… que suele servir para reflejar la dureza y las contradicciones de la vida de las clases bajas en México, le ha valido sendos premios a la mejor dirección en los festivales de Cannes y Venecia con Heli (2013) y La Región Salvaje (2016) respectivamente.
Siete años después de su último trabajo en la dirección, Escalante regresa este año con la que se podría definir como su cinta más comercial: Perdidos en la noche. Un título que, aún manteniendo algunas características de su cine más visceral en escenas con un importante contenido violento y erótico, se aleja de la mayoría de sus señas de identidad para componer una propuesta internacional y accesible en cuanto a concepción.
Perdidos en la noche narra, en clave de thriller, las desventuras de Emiliano, un joven de 20 años caracterizado por un gran sentido de la justicia, en busca de su madre Paloma, una profesora activista que desaparece en una protesta contra la industria minera local. Sus pesquisas lo adentrarán en el mundo oscuro, de secretos, oscuridad y venganza de los clanes criminales.
El reparto de la cinta está encabezado por Juan Daniel García, y en él podemos encontrar a Fernando Bonilla, Bárbara Mori, Jero Medina, Mayra Hermosilla o Esther Expósito. La española, que debuta en una producción mexicana con bastante solvencia, es uno de los grandes reclamos de la película en su interpretación de Mónica, una popular instagrammer local.
Perdidos en la noche es una coproducción entre México, Países Bajos, Alemania y Dinamarca a cargo de las productoras Bord Cadre Films, Cárcava Cine, Match Factory Productions, Pimienta Films y Snowglobe Films. Las ventas internacionales corren a cargo de The Match Factory.