Tras 148 días de negociaciones, idas y venidas, el parón de los guionistas de la meca del cine -prosigue el de actores y actrices- ha finalizado con el acuerdo del Sindicato de Guionistas WGA con las productoras hasta 2026.
Tras casi cinco meses de manifestaciones, negociaciones y reivindicaciones por una mejora de los derechos de los guionistas, la gran huelga de los guionistas de Hollywood finalizó ayer. Después del acuerdo suscrito entre la WGA y la Alianza de Productores de Cine y Televisión (AMPTP), los parones han terminado y se ha vuelto a la actividad de forma inmediata.
Así pues, los escritores de películas y series han vuelto a su trabajo, a pesar de que todavía faltan algunos detalles por concretar y a falta de la votación final, en la que se ratificará en las próximas semanas la consecución del acuerdo. Este durará tres años (las cosas están cambiando tanto y tan rápido en la industria que a nadie le interesaba comprometerse a un plazo más largo), hasta el 1 de mayo de 2026.
Uno de los aspectos más relevantes de este nuevo acuerdo y que ha ayudado a desencallar la situación es la sustancial mejora del incremento salarial (un 5%, 4% y 3,5% sucesivamente en cada uno de los tres años que durará) y de los ingresos residuales de las producciones en las que participen, permitiendo a los guionistas participar de un mayor porcentaje de las ventas de las producciones de su creación.
Nuevas obligaciones para las plataformas de Streaming
El acuerdo establece varias normas muy concretas al respecto de las plataformas de streaming -como Netflix, HBO MAX, Amazon Prime Video…-, que tendrán que abonar una compensación mínima de 100.000 dólares al guionista, en el caso de aquellas películas con un presupuesto de 30 millones de dólares o superiores. La media de ingresos residuales, subirá de media un 26% para cada producción.
Otro asunto extremadamente relevante del acuerdo es que los guionistas deberán recibir ciertas bonificaciones cuanto mayor sea la audiencia de su producción en la plataforma. ¿Qué implica esto? Que por primera vez -y si no encuentran un resquicio que les permita escabullirse-, deberán ser por primera vez totalmente transparente en cuanto a sus audiencias. Falta por saber en qué medida y de qué forma, pero el acuerdo debería obligarles a hacerlas públicas.
Limitaciones a la IA
Uno de los aspectos más conflictivos de esta huelga ha sido el del empleo de la IA para generar contenidos… y su obvia confrontación con el trabajo de los guionistas. Tras el acuerdo, las productoras no podrán utilizar estas tecnologías para ningún tipo de escritura, reescritura o búsqueda de fuentes que tenga por finalidad la creación de un guion. Así, se garantiza la preservación de los derechos de autor de los escritores.
Sin embargo, los escritores afiliados al WGA sí podrán servirse de estas herramientas en su proceso creativo, siempre y cuando reciban el consentimiento de la productora para la que estén trabajando. En ese caso, los estudios estarán obligados a informar al resto de profesionales que trabajan en la producción que su trabajo incluye elementos generados por Inteligencia Artificial.