Era un rumor conocido en todos los estamentos desde hace varias semanas pero que no acababa de materializarse. Finalmente hoy, tal y como recogen varios medios de comunicación nacionales e internacionales, la operación se ha cerrado.
52.400 millones de dólares en acciones (alrededor de 44.300 millones de euros) es la cantidad que Disney va a pagar a la Twenty-First Century Fox de Rupert Murdoch para quedarse con una parte de sus activos audiovisuales.
Unos activos que incluyen películas de producidas por Twentieth Century Fox, Fox Searchlight Pictures y Fox 2000, y varios canales de televisión por cable de Estados Unidos (Fox y National Geographic), aunque no el buque insignia, Fox News, además de un porcentaje del servicio de suscripción de vídeos por internet Hulu y el de la televisión por satélite europea Sky TV.
Según apuntan varios medios, el objetivo que Disney persigue con esta adquisición es reforzarse frente a la llegada de los nuevos players, como Netflix, Amazon Prime o Apple.
¿Veremos a los ‘Avatares’ y a Los Simpson confraternizando con Mickey y La Bella y Bestia? Pues seguramente …