El Museo de la Felicidad (MÜF), un espacio de 600 m² a 5 minutos a pie del Museo Reina Sofía, ofrece 20 experiencias inmersivas apoyadas en la ciencia del bienestar que prometen colmar de alegría a sus visitantes.
«Este museo no es solo un lugar, sino un espacio mágico donde las personas podrán explorar y descubrir sobre su propia felicidad a través de la historia, la cultura, la geografía, la literatura y numerosos estudios científicos respaldados por prestigiosas universidades.»
— Pablo Claver, Director del Museo de la Felicidad de Madrid
El concepto del Museo de la Felicidad parte de la noción de promover el bienestar emocional. Los fundadores decidieron elaborar un espacio donde las personas pudieran disfrutar de un recorrido que combina actividades lúdicas y educativas a través de varias secciones, como la de Historia y Geografía de la Felicidad; un recorrido por que abarca el concepto de felicidad y su búsqueda a lo largo del tiempo y en diferentes culturas.
También hay un risódromo, una sala donde las carcajadas están garantizadas y un «laboratorio de la Felicidad«, donde se pueden experimentar técnicas de bienestar emocional. El «espacio de la Felicidad más allá del dinero» ofrece reflexiones sobre cómo el bienestar no está ligado únicamente a lo material y el «show de la magia feliz» consiste en un espectáculo interactivo de magia a cargo de Miguel de Lucas, destinado a todos los públicos.
El museo también presenta espacios como una discoteca de la felicidad o un tobogán especial, que simboliza la importancia de soltar el estrés y disfrutar del momento.
También podrás disfrutar de simuladores de abrazos que generan oxitocina y de hacerte fotografías con mascotas del futuro además de resolver acertijos sobre animales que ríen. Antes de marcharte, no olvides visitar el cajero del MüF Bank, que no da dinero pero ofrece sorpresas.
El Museo de la Felicidad, que abrió sus puertas el 23 de septiembre de 2023 permite a los visitantes descubrir dónde viven los abuelos más felices del mundo, conocer por qué algunas canciones nos hacen más felices que otra y disfrutar del “subidón” emocional de hacer cosas nuevas.