En un movimiento histórico tras una revisión de seguridad nacional, el gobierno canadiense ha ordenado el cierre de las operaciones comerciales de TikTok en el país. A pesar de esta medida, los canadienses podrán seguir usando la popular aplicación. La noticia genera reacciones mixtas en el sector tecnológico y plantea interrogantes sobre el futuro de las redes sociales en Norteamérica.
El panorama digital de Canadá acaba de cambiar distribuido. El gobierno federal, tras una rigurosa revisión de seguridad nacional, ha ordenado la disolución de las operaciones de TikTok Technology Canada Inc., filial de ByteDance Ltd. El ministro de Industria, François-Philippe Champagne, fue el encargado de anunciar la medida, explicando que la decisión se basó en datos obtenidos por la comunidad de inteligencia de Canadá y socios gubernamentales clave.
“Este paso es una respuesta a los riesgos de seguridad que representan la presencia comercial de TikTok en nuestro país”, afirmó Champagne en su comunicado. Sin embargo, aclaró que esta orden no significa un bloqueo general de la plataforma: los canadienses podrán seguir creando cuentas y consumiendo contenido en TikTok. No obstante, el gobierno instó a los ciudadanos a mantenerse alerta y a practicar medidas de ciberseguridad más rigurosas al usar redes sociales.
La reacción de TikTok fue inmediata. Un portavoz de la compañía lamentó la decisión, destacando que provocará la pérdida de cientos de empleos locales y anunció que la empresa emprenderá acciones legales para desafiar la orden. “La plataforma TikTok seguirá disponible para que los creadores encuentren una audiencia, exploren nuevos intereses y para que los negocios prosperen”, añadió.
Este golpe a TikTok en Canadá sigue una tendencia preocupante para la aplicación en Occidente. En los Estados Unidos, la Cámara de Representantes aprobó en marzo de 2024 un proyecto de ley que prohibirá TikTok si ByteDance no cede su propiedad. La prohibición, prevista para entrar en vigor en enero de 2025, ha generado incertidumbre, especialmente con el presidente electo Donald Trump, quien, en un giro inesperado, ha expresado su apoyo a la plataforma a pesar de haber impulsado su primera prohibición en 2020. La aplicación ya había sido vetada en dispositivos federales en EE.UU. desde ese año.
En Canadá, las preocupaciones de seguridad sobre TikTok escalaron en febrero de 2023, cuando el gobierno prohibió la aplicación en dispositivos móviles oficiales. Este fue el primer indicio de que las operaciones de ByteDance en el país enfrentaban un escrutinio cada vez mayor.
El cierre de las oficinas de TikTok en Canadá plantea preguntas importantes sobre la regulación de plataformas digitales y su impacto en la privacidad y seguridad de los usuarios. Además, este movimiento podría influir en las políticas de otros países y llevar a un debate más profundo sobre el equilibrio entre la innovación tecnológica y la protección nacional.
