El documental dirigido por Mati Diop («Atlantique») reflexiona sobre el expolio de obras de arte por parte de Occidente durante el colonialismo.
El próximo viernes 13 de diciembre se estrena solo en cines «Dahomey», el segundo largometraje de la directora franco-senegalesa Mati Diop («Atlantique»). Se trata de la vigente ganadora del Oso de Oro del Festival de Berlín a la Mejor Película, galardón que recibió el pasado mes de febrero en el certamen de la capital alemana. «Dahomey» es un documental de creación que pretende registrar un momento histórico: la decisión del gobierno francés presidido por Emmanuel Macron de devolver 26 obras de arte procedentes del reino de Dahomey (en la actual Benín) a su comunidad de origen, en un inédito proceso de repatriación del patrimonio cultural africano. A día de hoy, muchos museos occidentales siguen poblados de obras de origen africano expoliadas durante la época colonial, lo que da en gran medida una idea de la importancia simbólica de esta restitución que no obstante retorna una minúscula parte de los cientos de obras que las tropas coloniales francesas extrajeron de Dahomey en 1892.
Cuenta la directora Mati Diop que durante el confinamiento por la pandemia reflexionó sobre el sentido que quería darle a su carrera como directora y el posicionamiento político de su obra. «Cuando supe que 26 tesoros reales de Dahomey iban a ser devueltos a Benín por Francia, dejé lo que estaba haciendo y decidí hacer una película sobre eso», recuerda. Una decisión acorde con su obra previa, especialmente con los mediometrajes que dirigó entre 2009 y 2019, antes de su debut en el largo con «Atlantique»: «Las películas que hice en Dakar entre 2009 y 2019 hablan de un proceso de Retorno, volver a mis orígenes africanos, a una parte de mí que había estado enterrada durante demasiado tiempo bajo la hegemonía de mi entorno occidental», explica.
Al conocer esta noticia, Diop empezó a imaginar una película de ficción que narraba la épica aventura de una de estas obras, desde que fue saqueada a finales del siglo XIX hasta su regreso a casa en 2075. «Tenía que anticipar el futuro, simplemente porque me parecía muy poco probable que cualquier restitución fuera inminente o incluso que estuviéramos vivos para presenciar un capítulo histórico como ese», recuerda. «Estuvimos atentos a la prensa hasta que de repente llegó la noticia llegó de que 26 tesoros reales de Abomey (Benín) habían sido seleccionados para la restitución el 10 de noviembre de 2021, y teníamos que hacer posible la filmación. Fue una carrera contra el tiempo, pidiendo permiso al gobierno beninés para escoltar los tesoros mientras organizábamos toda la logística de una filmación que iba de París a Cotonou».
«Dahomey» documenta el viaje de estas 26 piezas desde que abandonan el Museo Quai Branly de París hasta su llegada a Benín. En paralelo, la película nos ofrece el punto de vista de una de estas obras, una especie de deidad, híbrido entre hombre y animal, que reivindica el significado histórico del viaje de vuelta a su país y lo hace en el idioma fon, que todo el mundo habla en Benín. «Es una elección altamente política. Dahomey habla, ante todo, al pueblo de Benin, que debe poder escucharse y reconocerse. Frantz Fanon dijo: Hablar el propio idioma es existir absolutamente para el otro. Pero también es existir absolutamente para uno mismo».
Finalmente, la película llega al mundo académico africano, a la universidad, donde jóvenes estudiantes, profesores e historiadores reflexionan sobre el impacto simbólico y real de esta restitución en su país y en sus vidas. «Era necesario trasladar todo el asunto de la cumbre a la base, para crear un espacio que permitiera a los jóvenes identificar esta restitución como parte de su historia y reapropiársela. Crear un espacio donde pudieran ser escuchados», concluye Diop.