En Almería se han rodado algunas de las películas más conocidas del spaghetti western, además de grandes producciones como Cleopatra o Indiana Jones.
Hollywood lleva décadas grabando en España gracias al atractivo de sus paisajes, su buena localización geográfica, el buen clima y la variedad estética de sus territorios. Dentro de la península, Almería puede presumir de contar con el Desierto de Tabernas. Además es uno de los lugares con mayor variedad, ya que alberga playas, parques y montañas. Este es el motivo que lleva a que los equipos de localización puedan desplazar un gran rodaje sin preocuparse por las distancias o los tiempos.
El Desierto de Tabernas es uno de los paisajes referentes de la cultura española. Su aparición en rodajes de todo tipo de géneros ha logrado que sea uno de los destinos referentes para el turismo, sobre todo entre los seguidores del cine.
Entre las películas que se han grabado en las tierras áridas de Almería, se puede rescatar una lista que reúne grandes producciones del cine internacional.
Uno de los primeros directores que vio el potencial de Almería para recrear las tierras del lejano Oeste fue Sergio Leone, quien decidió iniciar la grabación de Por un puñado de dólares (1964) en las tierras almerienses. El Desierto de Tabernas puede galardonarse por haber convertido a Clint Eastwood en una gran estrella. El director italiano quedó encantado con los resultados y decidió regresar para la grabación de La muerte tenía un precio (1965) y El bueno, el feo y el malo (1966).
Gracias a la trilogía de Sergio Leone, Almería se convirtió en uno de los escenarios más solicitados para la grabación de los spaghetti western de la época. Durante los siguientes años, películas como Érase una vez en el Oeste (1968), Los cuatro truhanes (1969), Les llaman y les llamaban sinvergüenzas (1972), En el Oeste se puede hacer, amigo (1972), Una razón para vivir y una para morir (1973) o Un hombre llamado Noon (1973) continuaron aprovechando la estética del desierto almeriense para rodar sus largometrajes.
El éxito de Tabernas trascendió hasta convertirse en el escenario de producciones como Lawrence de Arabia (1962), Indiana Jones y la última cruzada (1989) y Exodus (2014).
En el caso de Lawrence de Arabia, el rodaje duró tres meses y medio. Tuvo un notable impacto económico en la región y fue una de las grandes producciones que promocionó el Desierto de Tabernas como un escenario natural de interés para la industria cinematográfica.
Indiana Jones y la última cruzada fue una de las mayores producciones, sobre todo a nivel mediático, que pasó por Almería. En la memoria de todos se guarda la persecución con tanque que se grabó en el propio desierto y que ha quedado para la posteridad como uno de los momentos más icónicos de la cinta.
Por su parte, Exodus reunió a un elenco de actores increíbles en las inmediaciones del desierto. Christian Bale, Joel Edgerton, Ben Kingsley, Dar Salim o Aaron Paul son algunos de los nombres que vagaron por el Desierto de Tabernas durante el rodaje.
Además de los escenarios naturales, la región cuenta con el Festival Internacional de Cine de Almería, un certamen con la finalidad de promocionar la provincia mediante el refuerzo de los vínculos históricos con la industria audiovisual y del que se han celebrado 21 ediciones. El evento está organizado por la Diputación Provincial de Almería y otorga más de una decena de premios. La última edición se celebró entre el 18 de noviembre y el 27 de noviembre de 2022.
Para un cinéfilo no hay nada mejor que visitar Almería y tratar de reconocer cada escenario de sus películas favoritas, sobre todo si es amante del género western. Perderse por el mismo desierto que los protagonistas de las ficciones de la gran pantalla o sentirse un verdadero aventurero recorriendo los paisajes áridos almerienses son oportunidades únicas que están al alcance de cualquiera que desee visitar la provincia española.