El Castillo de Cuéllar o Castillo de los Duques de Alburquerque es el monumento más emblemático de la villa de Cuéllar, provincia de Segovia, comunidad autónoma de Castilla y León, España. Está compuesto por múltiples estilos arquitectónicos y sometido a innumerables transformaciones durante siglos, es Bien de Interés Cultural Nacional desde 1931.
El monumento artístico presume en su magnificencia las influencias del Gótico y el Renacentismo, que abarcan desde el siglo XII al XVIII. Nació como edificación militar hasta el siglo XVI, transformándose en un suntuoso palacio, propiedad del ducado de Alburquerque.
El monumento ha acogido a ilustres huéspedes, desde Álvaro de Luna o Beltrán de la Cueva hasta destacadas figuras como el pintor Francisco Javier Parcerisa, el escritor José de Espronceda, o el duque de Wellington, Arthur Wellesley, acuartelado durante la Guerra de la Independencia.
A finales del siglo XIX el edificio se encontraba prácticamente abandonado. Es por ello que en 1938 se instaló en él un penal para presos políticos, al que se incorporó después un sanatorio para presos tuberculosos, retomando más tarde su utilización como penal hasta 1966. Aprovechando las estancias penitenciarias, en 1968 fue escenario del rodaje de América Rugiente (1970), un largometraje español de género policiaco dirigido por Alfio Caltabiano y protagonizado por Wayde Preston, Tano Cimarosa y Eduardo Fajardo.
En 1972 la Dirección General de Bellas Artes, llevó a cabo una intensa restauración, para instaurar en él un centro de Formación Profesional y tras diversas restauraciones posteriores se implantó en 1996 la Educación Secundaria Obligatoria y Bachillerato, convirtiéndose en el I.E.S. «Duque de Alburquerque».

A su vez, la oficina de Turismo fue inaugurada en 1996, con el fin de canalizar a un turismo creciente. En 1999 se reconoció oficialmente la Fundación del Archivo Histórico de la Casa Ducal de Alburquerque, albergando documentos que abarcan desde el siglo XII hasta 1994.
Y por último, en 1997 entró en escena el «Plan de Dinamización Turística de Cuéllar», que convirtió parte del edificio en un museo como reclamo turístico a través de unas visitas guiadas teatralizadas, iniciativa única hasta el momento en España, que poco a poco han imitado diferentes ciudades y municipios como Madrid, Zaragoza o Almería.