Jane Austen llegó a publicar solo 6 novelas completas, pero todas ellas han dado pie a numerosas adaptaciones audiovisuales. A pesar de que que su novela más conocida es Orgullo y Prejuicio, la historia en la que se basa Clueless, que lleva por título Emma, es la que más veces se ha versionado en el mundo audiovisual.
Jane Austen es una de las pocas autoras femeninas reconocidas a nivel mundial, famosa por sus libros en los que la ironía predominaba y en los que se reflejaba casi cómicamente la importancia de la diferencia de clases en el siglo XVIII. Y todo eso sin dejar de lado el romance. Emma es, de todas sus novelas, la que más veces ha sido adaptada al cine y a la televisión.
La historia que nos cuenta Emma dista mucho del resto de obras de Austen porque su heroína no buscaba el amor o estaba en una posición social y económica desventajosa. La Emma Woodhouse de la que nos habla Jane Austen es una mujer independiente, que ni quiere ni necesita casarse, que está en una buena posición social y económica y que vive con su padre, al que quiere y cuida. La misión autoimpuesta de la protagonista es buscarle pareja a sus amigas, ya que su mayor deseo es que sean tan felices y lleven una vida tan perfecta como ella. La llegada de una nueva mujer llena de virtudes hace que la envidia de Emma surja y entre búsquedas de pareja para su protegida e intentos de desvirtuar a esta nueva mujer, formará muchos líos entre los personajes que conforman su círculo cercano. Será el señor Knightley, quien es básicamente el mejor amigo de Emma, quien le eche en cara sus errores y le haga recapacitar, mejorar e intentar enmendar todos los líos en los que se ha metido ella y a los demás.
La más actual de las adaptaciones de Emma lleva como protagonista a Anya Taylor-Joy y se estrenó el pasado 2020. También es, probablemente, la adaptación más fiel a la historia original, ya que los personajes son los mismos y los sucesos transcurren casi de la misma forma que en el libro. Apenas hay ligeros detalles diferentes, como el hecho de que Emma es quien empareja a su institutriz con su nuevo marido, algo que no ocurre así en el libro.
Por otra parte, la BBC estrenó una miniserie en 2010 que también llevaba por nombre Emma y que tenía gran fidelidad con los libros. Sin embargo, esta miniserie tiene una perspectiva diferente, ya que el señor Knightley está mucho más presente e interviene con más frecuencia en los planes de Emma, que está convencida de que tiene un don similar al de cupido, a lo que su amigo intenta convencerle de que no es así.
Emma tiene muchas más adaptaciones, como por ejemplo Emma Aproved, una webserie de youtube con episodios de 5 minutos y que sigue los pasos de Lizzie Benneth de Orgullo y Prejuicio, pero siendo la protagonista una vlogger, lo que llevó a más episodios basados en los distintos personajes de Jane Austen. Otra es Aisha, una película india con ambiente de comedia musical. O la Emma de 1996, que al igual que las Emmas de 2010 y 2020 tiene mayor fidelidad con los libros.
Sin embargo la adaptación más famosa de Emma es la que está actualmente en Netflix, por tiempo limitado, eso sí, ya que será retirada de la parrilla de la plataforma el próximo 31 de julio. Esta es Clueless, que al estrenarse también en 1996 (un poco antes, en realidad) opacó totalmente a la versión que intentaba recrear el drama literario.
Clueless (o Fuera de Onda) es una comedia de instituto que dista mucho de la sociedad del siglo XVlll de la que hablaba Jane Austen. Aquí, Emma se llama Cher, y es una de esas estudiantes encasilladas en el estereotipo de abeja reina del instituto. Sus notas son buenas, no tiene problemas económicos y se lleva bien con su padre, igual que la Emma de los libros, con la que además comparte el gusto por trastear con las vidas amorosas de quienes están a su alrededor. Todo esto al más puro estilo de comedia surrealista de los noventa que recuerda un poco al también clásico Escuela de Jóvenes Asesinos, o Heathers, para los fans del musical.
Clueless no solo es la adaptación más famosa, también es la primera. Escrita y dirigida por Amy Heckerling y protagonizada por Alicia Silverstone, ambas supieron trasladar muy bien la esencia clásica de Emma a lo que sería la historia 200 años después.
Las diferencias ya son de por sí estructurales, aunque dentro de esas diferencias hay ciertas similitudes. Por ejemplo la aristocracia a la que pertenecía Emma y la élite popular a la que pertenece Cher se parecen, pero ahí donde el ego de Emma parece ser algo tan superior como su inteligencia, Cher es algo boba pero tiene buen corazón. Busca ayudar a sus amigos, sí, pero también apoyar las causas del medio ambiente o iniciativas escolares contra la discriminación racial. Ambas viven con su padre, pero el de Emma era un lord hipocondriaco mientras que el de Cher es un abogado adicto al trabajo. Y ese señor Knightley pasa de ser el hermano de su cuñado, y su mejor amigo, a ser su ex hermanastro, que al igual que su padre también quiere ser abogado porque es un universitario muy informado sobre los problemas que ocurren en el mundo.
Y por supuesto, las grandes co-protagonistas, sus amigas, que son en quienes recaen las acciones de la protagonista en ambas historias. Las de Cher tienen mucha más independencia que las de Emma, ya que solo sienten la insistencia de una amiga y no la presión de una mujer con mayor posición social a las de ellas, que en el siglo XVIII tenía muchísima influencia a nivel social.
